¿A dónde van los gatos cuando salen de casa?

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¿A dónde van los gatos cuando salen de casa?

¿Sabe usted a dónde y qué tan lejos van los gatos cuando salen de casa y aún durante varios días los perdemos de vista, y la familia, especialmente los niños y nosotros mismos nos preocupamos por su vida y su salud?

Un estudio realizado durante más de dos años por investigadores de la Universidad de Illinois, en los Estados Unidos,  para conocer cada uno de sus movimientos fuera del hogar, concluyó que estas  mascotas se van de paseo por un territorio de unas dos hectáreas, cerca de casa y los  asilvestrados o callejeros se desplazan en sus caminatas por territorios muchos más amplios  que los domésticos, llegando algunos a recorrer, en sus rondas, hasta 547 hectáreas.

¿A dónde van los gatos cuando salen de casa?

Por Juan Roberto Zavala.

¿Sabe usted a dónde y qué tan lejos van los gatos cuando salen de casa y aún durante varios días los perdemos de vista, y la familia, especialmente los niños y nosotros mismos nos preocupamos por su vida y su salud?

 

Un estudio realizado durante más de dos años por investigadores de la Universidad de Illinois, en los Estados Unidos,  para conocer cada uno de sus movimientos fuera del hogar, concluyó que estas  mascotas se van de paseo por un territorio de unas dos hectáreas, cerca de casa y los  asilvestrados o callejeros se desplazan en sus caminatas por territorios muchos más amplios  que los domésticos, llegando algunos a recorrer, en sus rondas, hasta 547 hectáreas 

Del estudio, citado por el periódico ABC de Madrid,  se desprende que los paseos los realiza este mamífero carnívoro de la Familia Felidae por sitios urbanos o rurales para convivir con otros gatos, cruzarse o curiosear  y para ello atraviesa calles, estacionamientos, jardines, campos de juego, patios y campos agrícolas, y por tierra o a través de los techos, se introducen en casas, fábricas, bodegas  y comercios.

Los investigadores colocaron a los gatos collares con un avanzado equipo de radio, con sensores de vibración, para conocer y registrar cada movimiento de los felinos y les dieron seguimiento a través de las calles de Champaing y Urbana, ciudades  del centro de Illinois.

Además, del estudio resultó también, según el periódico citado, que los gatos domésticos tienen un comportamiento mucho más precavido que los sin dueño y la mayoría se daban paseos más cortos y cerca de casa, y en un área que no pasaba de dos hectáreas.

Para los investigadores este dato es muy importante pues se ha demostrado que los felinos domésticos pasan dormidos o con una actividad muy baja el 97% de su tiempo, dedicando solo el 3% restante a actividades enérgicas, como correr o acechar a sus presas, en tanto que los gatos sin dueño se mantienen activos el 14% de su tiempo.

Aunque la mayoría de los gatos del estudio se mantuvo dentro de unos 300 metros en las cercanías de las construcciones humanas, con lo que se demuestra el nivel de dependencia de los humanos, la vida conjunta entre salvajes y domésticos no es fácil, pues constantemente se producen conflictos entre ellos, como la defensa de sus territorios, el alimento y el apareamiento, donde muchos pierdan la vida.

Además, agrega el estudio, en estas peleas los domésticos pueden contraer enfermedades de los felinos silvestres, con lo que pueden infectar a sus dueños, como el parásito toxoplasma Gondii, que puede causar problemas neurológicos, reproductivos y respiratorios, incluso en los humanos, además de la rabia, la fiebre por arañazo de gato, la leucemia felina y el virus de la inmunodeficiencia felina.

Para concluir queremos recordar que a este felino, acompañante del hombre desde hace aproximadamente 9 mil años, según restos descubiertos recientemente en Chipre, se le debe permitir desarrollar su instinto cazador, pues son depredadores astutos y muy eficaces. De esta manera tendrán una vida más plena y tranquila.